Para ello el Consejo cuenta con un panel de cata de expertos catadores que evalúan si las muestras a ser amparadas se ajustan a las características organolépticas recogidas en el Pliego de Condiciones.
El proceso terminan con la solicitud del operador al Consejo Regulador de los correspondientes precintos de garantías o contraetiquetas tras la calificación de la partida por el órgano de Control.
La verificación de que el producto amparado por la Denominación de Origen Valle de Güímar cumpla con los requisitos del Pliego de Condiciones es llevada a cabo por el Instituto Canario de Calidad Agroalimetaria (ICCA) dependiente de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias.
Son objeto de control todos los operadores e instalaciones inscritas y los productos acogidos a la denominación. Este control se entiende desde la producción hasta el comportamiento en el mercado.
El alcance es el aseguramiento que los productos que se amparan cumplan con los requisitos establecidos en los pliegos y, en los acuerdos de órgano de gestión en materia de producción, elaboración o características de dichos productos, y en particular, los referentes al origen, variedades utilizadas, métodos de producción y elaboración y características físico-químicas y organolépticas.